Boon Edam anunció que el Domain Tower Building, inaugurado en enero de 2017, recientemente equipó su vestíbulo principal con dos torniquetes ópticos Speedlane 300 y una compuerta de acceso Winglock 900 para garantizar que solo los empleados y ocupantes autorizados puedan ingresar a las áreas seguras del edificio.
El edificio de uso mixto y gran altura, ubicado en el famoso distrito comercial Avenida de los Insurgentes en la Ciudad de México, tiene 19 pisos, un área residencial con 112 apartamentos, un área corporativa con alquiler de oficinas (actualmente parcialmente ocupado) , una azotea verde, un gimnasio y una zona comercial en la planta baja.
Torniquetes ópticos Boon Edam
Los dos torniquetes ópticos y la puerta de acceso se integraron con el sistema de seguridad del edificio, compuesto por un sistema de control de acceso que usa lectores de tarjetas con diferentes códigos de permiso para empleados y visitantes y también está vinculado al sistema de control de ascensores.
«A medida que las personas ingresan, les damos una tarjeta que programamos y controlamos desde la oficina de administración. Con solo agitar la tarjeta a través del lector, los paneles del torniquete se abren e indican a qué piso debe ir la persona y qué elevador debería tomar», explica Félix Ávila Sánchez, Gerente de Operaciones y Mantenimiento de Domain Tower.
El torniquete óptico Speedlane 300 ofrece un alto nivel de seguridad y respalda el trabajo de los empleados de seguridad y recepcionistas, garantizando que únicamente los usuarios autorizados puedan acceder a ciertas áreas de construcción.
Esta es una solución estética también diseñada para enfatizar la seguridad y la protección. El torniquete cuenta con un elegante diseño de gabinete ovalado con una huella relativamente pequeña y dos paneles de ala iluminados que se deslizan dentro de los gabinetes para crear un carril abierto después de la autorización de la tarjeta.
La puerta de acceso Winglock 900 es una entrada de seguridad alternativa que ofrece un acceso más fácil para personas con discapacidades o en situaciones que requieren que los carros se muevan dentro del área en espacios limitados. Con un único panel de vidrio con bisagras en un pedestal de metal, la puerta se abre o se cierra según la dirección del usuario.
Además, en el caso de una emergencia (incendio, terremoto, etc.), las alarmas se activan y los torniquetes y la puerta se abren automáticamente para garantizar que las personas puedan salir libremente, lo que maximiza su protección y minimiza los riesgos.
En la actualidad, los resultados que obtuvimos con la tecnología de Boon Edam son óptimos, el equipo se integró fácilmente con el sistema de seguridad del edificio y el sistema de control del ascensor y, más importante aún, podemos controlar el acceso al edificio.
Nadie que no esté autorizado puede ingresar al edificio. Con estos resultados, obviamente recomendaría la marca y sus soluciones», concluyó Félix Ávila.